"un fallo lo tiene cualquiera,... cualquiera menos tú" sonaba esa canción. El archivo muerto resultaba tierno en cierto sentido, recordar el pasado aveces resulta agradable.
Mas agradable era ver aquella niña tan linda sonriendo el dia de su cumpleaños frente a un pastel muy raro, también se notaba la sonrisa de su madre.
Desagradable resultaba imaginarse aquella sonrisa convertida en llantos por desesperación o algo que se le pareciera. Terco obserbaba las fotografias mas por distracción que por desifrar algo.
Era muy de madrugada. Inconciente toco el sueño y lo envolvio en su silla.
Tubo un sueño extraño. Conocio en ese lugar extraño, lugar de sueños... conocio a Lilia Toledo, la conocio porque en realidad era desconocida. Quizá era su mente, pero la sonrisa seguia siendo la misma, una sonrisa que cautiva hasta al mas significante mortal de este mundo... asi lo concebia.
Soño que se enamoraba.... y experimentó en el sueño lo que experimenta un loco enamorado.
La vida aveces se torna alrededor de experimentos, ahi en el sueño... ahí desesperación... ahí habia odio, ahí hubo de todo, ahí casi se le va la vida... casi el corazón.
Despertó y cambió la realidad tan abruptamente. - que sueño tan extraño que bueno que fue un sueño - resultaba orrible recordar cuando se sintió asi, por alguín que no le correspondió pero no era tiempo de pensar en esas cosas, o tal vez si pero de manera positiva, se le ocurrio una idea, una hipótesis, eran las 9 de la mañana, tomó el auricular y llamo a casa de la familia toledo
Pidió revisar de nuevo la habitación de Lilia..
pero la respuesta no fue ... agradable. La madre de Lilia llorando nego esa petición.
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