credits by: evtkw

martes, 24 de mayo de 2016

Dos cosas


No digo que apagues tus pasiones, aprende a guardarlas pero para posponerlas, aprende a pensar con ellas, con su compañía, sentadas a un lado tuyo, sosteniendo tus hojas y libros, sirviéndote una taza de café. Aprende a guardarlas, pero posponiéndolas, para que después las ejecutes de mejor manera y con el respeto que merecen, aprende a pensar con ellas, que la espera sirva para mejorarlas, para darle rienda suelta de la mejor manera.

Conócelas

Es la forma de rendir a dos amos a la vez, aprende a que no interfieran en tu trabajo, pero posponiéndolas. Pero también conócelas.

II 



Eres débil, porqué insistes en mi búsqueda, porqué sigues escuchando las palabras que no deseas. Ya son parte de ti, no conoces otra forma, te aferras a lo conocido. Quédate sola, realmente sola para que te conozcas.

Aléjate del melodrama, de las novelas que veía tu madre. Tu no eres culpable, pero no sabes como es tu vida, estas perdida entre las luces de esta ciudad. Yo no quiero romperte el corazón, que lo haga alguien más, alguien más mundano. Busca a ese viejo novio tuyo, a sabiendas que te arrojará a su cama, y después con la ausente charla posterior regresarás a tu casa, pensando, si otra vez se repite...

No pidas un consejero, al final, todos terminarán deseandote, y en el fondo, fingiendo lo sabrás... pero pensarás que es diferente y el ciclo se repite.

viernes, 20 de mayo de 2016

constricciones



Acepté tu ausencia, y la aceptaré en días próximos cuando te vuelvas fugas. No quiero que te vayas, quiero que el tiempo detenga su curso; hay lugares así en nuestra imaginación, en la de los teóricos, en la de mis historias torcidas.

Quise inventar una mitología única, de nuestro país extraño, inspirada en los planetas de tus manos, en tu mirada definitiva y llena de nostalgia, en tu sonrisa que todo lo cambia, en la tarde que te acaricia.

No quiero que te vayas, quédate dormida mientras leo un poco y me termino la taza de té.

Quédate perdida con tu suspiro tranquilo, proyecta este mundo como si las cosas estuvieran bien, como si no tuviéramos que preocuparnos por nuestro futuro, por si podremos comprar mas tazas bonitas, por si puedes mirar la tarde tranquila, por si se dirigirán a nosotros con respeto.

No te ausentes, apago mi switch enamoradizo, te cuento más historias, como si mi memoria fuera buena, creo que se activa cuando estás cerca. Deja sentirme útil, preparandote otra taza de té, vigilando tu sueño como si te protegiera de un dragón.

Ya no me preocupa que no me quieras, así esta constreñido el universo que se reduce esta tarde, a mirarte dormitando, vencida ya por el cansancio, cómo te trata la vida, cómo nos trata, porqué buscamos más el caos.

Te quiero así tranquila, tus instantes por siempre me los quedo, así es, así esta constreñido el universo.

Nadie comprende, porque yo no comprendo, solo sé que mi cariño está a salvo, escondido en tu laberinto. Quédate así, indesifrable, mientras yo mejoro mi técnica escondiéndote, escondiendo tu historia para siempre.

Mi cariño es escondido, vuelves mi corazón mas fuerte, ingenuo, cuando joven se partió en pedasos entrópicos. Ya no me preocupa que no me quieras, se que te vovleré a ver más adelante, en tardes como esta, hasta convertirnos en estrellas.

lunes, 2 de mayo de 2016

sueños


Te soñé de nuevo, que pasaba, pero este parecia más cierto que cuando lo confesabas. No me gusta que te despidas, ni cuando lo hacías con la bendición, cuando me regresaba noche de tu casa.

No me gusta que te despidas, diciendo que nos vamos a ver en la semana, porque aprendo a mentir y a finjir.

No se porque me empeño explicándolo, justificando, como si hubiese necesidad de que descubrieran la raíz del asunto. Explico minuciosamente lo que guardas de mí, para ser más frio, para no estar expuesto, para estar a salvo.

Dicen que no debe ser así, pero que importa, de todos modos se vive adolorido con el pesar de la vida, con el olvido, con el abandono.

Quiero ser indecifrable como tú.

Nunca más en la vida

Nunca te quedó claro que jamás quería volverte a ver, al menos por mi voluntad propia.  Por tu parte tenías esa idea idiota de que podíamos ...