credits by: evtkw

sábado, 23 de mayo de 2015

Tarde caprichosa, Elle y el adolescente


No tengo ningún problema con la soledad, de hecho a sido una compañera con una lealtad tremenda; le debo mucho. Tal vez cada quien tiene su propia soledad, la mía, es sencilla. 

Mi soledad en este momento no tendría problema si Elle me acompañará. Siento como se cuela caprichosamente esa necesidad irracional de tenerle cerca. Entonces lo que normalmente es absurdo se vuelve no absurdo, en este momento me siento absurdo; necesito cerca a Elle. 

¿Porqué? , bueno... hoy es una de esas tardes, tarde de caprich, que molesto es tolerarme en estos momentos.

Llevo una hora sentado, intentando hacer mi trabajo, el que me salvará la vida por un mes; la vida citadina. 

Necesito a Elle cerca, juro que solo escucharía las palabras del teclado de mi computadora; no le diría palabras inconexas. Tal vez pueda preparar un poco de té, de esos que se pueden acompañar con leche. La necesito cerca, juro que hasta apagaría mi deseo de tumbarla en la cama, pues Elle ha dejado claro que no quiere nada de esas cosas.

Necesito a Elle y la seguridad que me hace sentir cuando está cerca. No le temo a la oscuridad, pero mi soledad está aburrida de mí. Necesito a Elle porque siento utilidad, porque emblandece mi corazón, porque me siento más humano y menos irónico; se esfuma mi pesado sentido del humor. 

Es un capricho... ya pasará... ya pasará.... está bien... está bien. 

Ya pasará, son sentimientos muy humanos... pasajeros... pasajeros.... pasajeros.... como seguramente mi existencia lo ha sido para Elle.


Necesito a Elle porque estoy enamorado de Elle, de un amor irracional, sí nada normal. Dicen que para enamorarte de una persona debes pasar tiempo con ella. Yo me he enamorado de ella, pero no quiere pasar el tiempo conmigo. Hago las cosas al revés con Elle.

Elle me hace recordar mi época de mayor timidez, Elle es mi punto débil en el universo. Elle no me quiere.

Elle trae devuelta mi espíritu temerario de la juventud, con elle me siento un hombre normal.

Me sintiría mas tranquilo si Elle sintiera lo mismo por mí, pero no es así. ¿Estará cansada de que trate de invitarla a salir? Elle siempre está ocupada, yo también pero mi trabajo puedo hacerlo de madrugada, incluso cuando llego a verla siento un plus extra. Si estoy enamorado de Elle.

Hoy es el día libre de Elle, lo ha dicho en uno de sus mensajes. Ya se la respuesta, Elle está lejos, y no querrá salir conmigo en los días restantes del universo. ¿Saldrá con alguien hoy? seguramente, y será divertido para Elle. Sonreirá Elle con su bonita sonrisa, será más dispuesta...

No me sorprende, que Elle como otras, tenga poca empatía con mis charlas fractales y laberintos; secretos del universo que aburren a la mayoría. No me sorprende que Elle no quiera salir, pero su rechazo es el único que me causa nostalgía; esque me he enamorado de Elle.

De los lunares en las manos de Elle. Si eres tú... Elle.

Es tonto, Elle me hace sentir como un adolescente impaciente. Soy muy frío, pero elle es el centro de la galaxia, me hipnotiza. Elle podría tener el control y yo ser su esclavo. Con Elle pierdo las batallas.


Mañana despetaré bien, y mi capricho no te molestará en lo más mínimo. Elle no se enterará de el, pues no tiene importancia en el universo.

Pasará el tiempo ... hasta que Elle se aparesca de nuevo por el azar y yo comienze de nuevo con esta tonteria, pero bueno, algún lado flaco debemos tener...

No tiene importancia que yo extrañe a Elle, no tiene importancia para el curso de los días.


Para mí si, pero soy uno entre millones.

El último en la fila de Elle.


sábado, 9 de mayo de 2015

Noche lluviosa

Noche lluviosa





Recuerda esa canción simple de la adolescencia, con sus estrofas simples; no pensó que ha estas alturas tuviese validez. Representa una severa afirmación, el pensamiento que envuelve a su mente en este momento. Representa la realidad de esta noche.

Llama a la puerta y contesta la ausencia, estos días se ha vuelto muy tímida pero está ahí y no quiere mencionar su nombre pues siente pena porque sabe bien las palabras que no quiere escuchar. No tiene problema con ser ignorada, pues sabe que al final ella siempre se queda con él.

Escucha a sus ancestros sabios, esos latinoamericanos que se escaparon de la dictadura y escribieron cosas fantásticas en la pobreza que representaba vivir en Europa. Están grabados por siempre, sus palabras son su compañía esta noche.

Después se tranquiliza, pero llama a la puerta el capricho, es simple ... muy simple. Consiste en preparar un arsenal de palabras y escribir, como lo hacen esos personajes de ficción cuya existencia -ahora entiende- nunca será palpable en este mundo.

Una llamada esta noche no es costeable, en la ciudad son muy caras, en este país son muy caras. En esta condición aficionada se la tiene que jugar con unas cuantas monedas.

El capricho concreto es simple, muy simple; consiste en escribirle. Realmente ignora si hubo tiempo alguno en que se apreciara dicho capricho, pues en estos tiempos se ve como un hecho estúpido. Sí, lo acabo de comprobar con ese joven que escribe poesía llena de conjeturas y suposiciones. Después tristemente asevera que sus palabras inconexas se quedarán perdidas en el olvido.

Así se ve, espera una llamada...en noches como esta.

Toma su guitarra, la deja olvidada, recuerda al profesor en la tarde que tiene demasiados alumnos para ponerle atención.

Espera la llamada de ella. Piensa que no tiene sentido seguir escribiéndole y llamando, ella no tiene ningún interés. Él la recuerda, incluso en su trabajo, en la lectura del periódico y en las charlas de café con sus colegas. Ella seguramente anda por ahí en otra frecuencia, simplemente no tiene ningún interés. Pero Él aprovecha el punto de fuga, se empeña en escribir esa historia para ganar aquel premio y comprar el boleto de avión que lo llevará a Europa. Ella no encaja en su historia, ella no está con él, ella ni un segundo en el día se acuerda de Él. Él está empeñado en escribirla, pero le hemos dicho que no encaja en la historia.

Es viernes amigo, seguramente estará coqueteando con alguien y tu aquí desperdiciando el tiempo tratando de incluirla en esta historia. Nadie está como tú, aquí encerrado sentado en tu escritorio con libros regados que te hacen sentir más seguro. Si en este momento dejas de buscarla, seguramente no notara tu ausencia y esa historia está ansiosa por ser plasmada en el papel.


Vamos, no seas terco, de algún modo dijo Borges (no recuerdo las palabras exactas) que no existe el olvido. Yo se que nunca la olvidarás, pero no te olvides a ti mismo. No seas necio, empeñado en la compañía del olvido.

Versión oculta de los agradecimientos de mi tesis

De manera especial a ti, ..., ahora que estás a salvo detrás de largos océanos, y en la versión secreta de estos agradecimientos  -donde no ...