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lunes, 27 de abril de 2015

petición

Me interesa todo de tí, menos saber quien acaricia tu cuerpo y besa tus labios... eso definitivamente no. Pues si en este mundo hay distintos ríos y lagos, y los hombres muertos de sed nos escabullimos en alguno. Entonces no está de mas decirte que he sobrevivido alguna vez a la sed de tu río, pues ya comprendí que lo voy a hacer toda la vida.Por eso no quiero jugar cerca de tus aguas, porque es cierta crueldad estar cerca y no poder beber.Tal vez me ahogue, nisiquiera eso podré saber. No quiero jugar a ser tu amigo, finjiendo que me da temor meterme a nadar en tus aguas torrentes acaudaladas. Porque la brisa me invita, tu suave brisa de primavera, y tu aroma de flores.¿Qué será de nosotros cuando seamos viejos?No quiero esperar una vida, cuando nuestros ríos se evaporen.Así que... ¿siempre tendrás eso en cuenta', la maldición de la incomodidad del desierto, mi desierto que es tierra infértil en tu ausencia.Puedes platicar conmigo, pero realmente siempre te voy a recordar mi sed... toda la vida. Esa es tu condena en mi mundo, el que siempre tendrá un lugar para ti; intacto y polvoriento. Una arquitectura que en un futuro nadie podrá encontrar, quedará escondida y se pulverizará cuando los rastros de mi existencia se esfumen... cuando los días dejen de serlo.

lunes, 13 de abril de 2015

Edad transitoria

Resignado llega casa esperando el “reclamo de atención” de las mascotas humanas que no pidió tener. Sí, son los rumies que esperan sus croquetas; una dosis de despotismo del cual son adictos. En ellos continua oculta su infancia de juegos de pelota, que es consuelo y acaricia de manera suave arrojándolos hacia una fantasía que bien alimentó la televisión y de la cual serán presos toda su vida.


Él no ha llegado a los 30 y siente el cansancio de una edad transitoria. Ya pesan las noches o las mañanas de putas que bien conoce pero que finge no conocer para estar sorprendido y sentirse más excitado, ellas también fingen ser poco frías no son las “típicas”.

Ya pesan las tardes de cigarrillo y la vista concentrada en un párrafo que cuesta horas terminar. Ya cansan las tazas de café amargo y la charla a gritos consigomismo.

Después de gritos extensos, salen los demonios que soportaron encerrados más de ocho años con tanta furia, la música le conduce a cierto éxtasis poco común en la realidad de las tardes calurosas.

Ahí esta desgastando su corazón, fuertemente desgastándo. A la mañana siguiente jurará que será la última puta. Que sus rodillas y billetera no soportarán más (nunca aprendió a hacer el amor). Entonces se dirigió a casa sin pasar a tomar el desayuno, solo tomó un fuerte café para soportar el trayecto de regreso.

Agonizante la respiración se detiene y pidiendo que ya es justo, que será mejor detener el auto. Se mentaliza para soportar la cena mientras le preguntan si se encuentra bien, que se ve pálido, digo.... no está de más "no poder respirar".

Soporta el trayecto de regreso y no intenta pasar dormido el fin de semana. Tal vez quiere desgastarse más, tal vez tiene deseos de morirse y experimentar como sería el funeral. Tal vez reconoce que le gusta estar en estado de agonía.

Deja las taza de café sobre el escritorio, mira la billetera vacía y siente el deseo que no será consumido satisfactoriamente como lo bien lo hace el cigarrillo en el cenicero.



sábado, 11 de abril de 2015

vestido de primavera

A llegado a tu cuerpo la primavera, no paro de mirar el campo de flores dibujado en tu ligero vestido.

La sombra se vuelve tu aliada y de las flores, pues el sol es tremendo esta tarde y quiere acariciarte con sus rayos como lo puedo hacer con la mirada en este momento, solo con la mirada.

Miro debajo tus piernas cruzadas, en tus medias negras me parece que hay el ambiente nublado (menos hostíl) que muchos deseamos en este momento. Antes pordría llamarse un descuido el hecho de que puedo ver un poco más, pero al parecer no te importa. 

Cae la cascada de tus cabellos negros ondulados y hasta siento la brisa, realmente me siento como en el campo en primavera cerca de ese río improvisado que hacen las lluvias donde corrí a un lado muchas veces cuando era niño.

Pasaste mucho tiempo sonriendo y tardaste en decir una palabra, ¿Qué ocultas mujer misteriosa?

Seguramente es algo que no está debajo de tu falda, pues eso no te preocpa. 

jueves, 2 de abril de 2015

Sinceridad en forma pura

Me siento tranquilo ahora que me dejas sin respuesta, realmente espero que se dispersen tus pensamientos hacia otra dirección donde yo no me encuentre. No esperaba que me molestaras estos días con tus saludos, preguntas, disertaciones, y hasta males de amores. No has entendido que ya no estoy para tí. 

Como decirte que ya no siento esa deuda sensiblera, causada por el guíon catastrófico del que me sentí preso, tal vez lo entendí de ese modo porque yo no se que entiendes tú. Esta mañana queria decirte que, el no buscarte quiere decir que deseo saber nada de tí, que me dejes tranquilo con tus pendejadas, que no estoy dispuesto a escucharte y que detesto hacerlo. 

Tal vez no debí molestar antes con mis pendejadas, con mis chispasos de alegría y estupidez mencionando las palabras que no pude mencionar con anterioridad.

Ya no maldigo el día en que te conocí por que fue necesario, pero ya estoy en este punto de la vida en que buscarte es ridículo. No quiero saber nada de tí ni de tus males, no quiero saber nada de tí ni de tus imágenes. Tan solo dicen que debo ser cortés y saludarte cuando te encuentre en la calle, pues uno nunca sabe.

Me hace sentir tranquilo el hecho de que no busco cierta venganza por el desprecio que sentí, porque así lo entendí. Como dice aquella canción -cada mes escribía una carta y cada noche estube de luto-, ahora comprendo que eres una especie de fantasma porque lo que ha sido quedó atrapado en el tiempo, ya pasó toda esa transición, no es justo que lo sigas haciendo. Soy un desconocido y realmente no me interesa lo que sucede contigo como tampoco te interesa lo que sucede conmigo. 

Yo también he dejado viejas prácticas, también debes dejarlas. Esta mañana quise decir que apostaría cuatro monedas de plata a que seguiras o sigues siendo una pendeja, pero con una palabra disfrasada. En unos días regresarás al lugar y con las personas que creíste haber superado hoy. 

Puedes reclamarme si quieres, o contarle a alguien que estubiste de osciosa buscando mi opinión y que sabes el rito: yo me sentaría a escribir lo que siento. 

Largate por favor, largate de mi vida, ya no eres nada. 

Nunca más en la vida

Nunca te quedó claro que jamás quería volverte a ver, al menos por mi voluntad propia.  Por tu parte tenías esa idea idiota de que podíamos ...