credits by: evtkw

martes, 2 de julio de 2013

Las palabras de todos

Mis amigos, sujetos de nuestras charlas preguntan por tí, en algún momento tiempo atrás lo hicierón cuando pensaban que el humor me sobraba. Ahora lo hacen de forma anónima, disimuladamente o indirectamente. Yo no puedo saber si las anteriores palabras describen con exactitud la manera en que preguntan por tí. Simplemente lo hacen, de forma tan simple como ponerle  azucar al café, un complemento, como las bancas en el parque o como las plantas que adornan la cafetería de la esquina, como ese kiosco inútil donde nadie puede subirse a la mitad del parque donde me quedé esperando otra respuesta tuya, donde quedaste esperando otra respuesta, donde esperabamos respuestas diferentes, aquel punto divergente distante distante distante distante. Fue necesario hacercarme a él debido al accidente; cuando te cruzaste y casí te atropeyo con mis palabras. ¿Quién decidió colocarme en el pasillo donde te miré por primera vez? El autor de nuestras historias no quizó mostrar su rostro. Quizá aún se encuentre en este momento tecleando palabras frente a su computadora.

Me pregunto que nos hiciste a todos, ¿Cuál era el secreto de tu papel como protagonista? enserio que miro fotografías, discos, cartas y poemas. Ahí te refujias, donde se refujia el pasado, donde se encapsula un instante del tiempo y me parece que es basura. Hasta he llegado a pensar en una especie de hechiso, de seguera. Eres como una fea modelo que maquillan y arreglan para vender. Nos vendierón tu imagen, nos vendierón tu historía, nos vendierón tu sonrisa y forma de ser, alguíen nos vendio eso en algún momento y nos a borrado la memoria para evitar exigir un reclamo. ¿Que les pasó a todos? ¿Porque siguen preguntando por tí?

¡Nos abandonaste! te convertiste en lo que eres y extrañamos la imagen que nos enseñarón de tí. Sentimos un vacío terrible, nos sentimos engañados. Seguramente todos pensamos ¡Que nos debuelvan! ¡Que nos devuelvan! Que nos devuelvan tu imagen, tu risa, tus historias, tu voz, tu canto. Muñequita.

Lo sabemos, eres un paciente o prisionero encerrado en un calabozo, indirectamente nos preguntamos y finjimos no dar importancia. Elizeo va a cortar a su novia para buscarte. Matías a conocido a alguíen que se parece a tí y quiere conquistarle. Jeremías está como loco algunas veces, cuando hay luna llena como los hombres lobos se convierte en un animal sediento por tu sangre y corre a buscarte porque a descubierto según el tu escondite y no es que no le crea, quizpá se volvió mentiroso o a enloquecido.

Pero yo respeto a los locos, pienso que son personas inteligentes y sin compasión sobretodo con ellos mismos. A este pobre hombre es un animal sediento, hadeante regresa como aturdido con y sin remordimientos, como si se hibiese inyectado heroína, tan solo es un muchacho indefenso, eso quiero pensar para compadecerle un poco, quizá muera, sediente porque se muy bien que representas un desierto y el oasís donde se alimenta pronte quedará bien seco. Cuando deje de arrastrarse, cuando deje de auyar, cuando deje de mirarte en las noches o por las mañanas, cuando dejen de hacerlo se acabará el cuento, se acabará la película, se acabara su historia, se acabara tu vida.

Corres entre paginas, en la música, en sus pinturas. Eres todas las mujeres bellas que bailan y cantan. Estás en todos lados, todos te quieren, como si fueras lo mejor, como si existieran ignorando que te inventarón, alguine desconocido te invento, para no sentir el cauiverio en este lugar.

Que la timides de mis ojos se empeñe en mirar hacia la luz porque yo también te miro como lo hacen ellos, pero cuando me preguntan me hago el disimulado y les digo que nunca te conocí, que nunca te tube cerca, que nunca te abrazé, que nunca te besé, que nunca te hice el amor. Yo les he dicho que no te conosco y me hiere cuando hablan de tí maravillas, cuando por tí suspirán, cuando te hacen música o poemas, o cuando me roban las canciones que hice para tí.

Me hiere cuando me siguen preguntando y afirman que seguramnte te conocí, pero les he dicho que no tube tal fortuna, que he sido un hombre simple.

Y en verdad lo soy, ellos se empeñan en desenmarañar recuerdos empolvados con el tiempo y en cierto sentido absurdos. Yo solo me conformo con las flores.

Por eso este verano las miraré y a ellos no, nunca más.  Nunca más.

Señor escritor, exijo que termine con esta historia de una vez por todas.


Gerardo Urrutia

No hay comentarios:

Nunca más en la vida

Nunca te quedó claro que jamás quería volverte a ver, al menos por mi voluntad propia.  Por tu parte tenías esa idea idiota de que podíamos ...