credits by: evtkw

miércoles, 14 de mayo de 2014

Canonización de las musas miserables

...aparece como un chispaso a media mañana con sus señales luminosas en el desayuno solitario. Pero se advierte distante. También presa de esa enfermedad amorosa moderna, esa estúpida que grita fuertemente signos, dibujos y frases remontándonos a los pseudo poemas amorosos de papeleria. Ella no es el regaso, es la pendeja esperanza por ser diferente, de que en sus ojos exista unicidad almenos por un instante.

....se le conoce cuando las tazas de té anunciaban el otoño eterno. En su delicado cuerpo un fuerte de regaso para el hombre más débil, incluso para el más viólento y fuerte. Es la próxima estación del tren que va hacia el abismo. 

Podrido cansancio tan humano, hombres solitarios rígidos tan humanos.

... cuando miras sus ojos sin sombras, sin maquillaje, como niña no infantil, sino aquella que está entre el puente de la locura y madurez. En sus ojos vivos puede verse el universo tan solo en un instante.

... inconfundible  su mirada penetrante y la voz. Gusta de las compañías, tranquilas y extremas. Por supuesto acompañada y tranquila de alguién más, eso lo hace sentir miserable (algunas veces), pero de alguna manera trata de decirle: "como única condición, podre decirte y hacerte más halagos pero cuida que no te vea con alguién, para creerte mía".  Pero dime porfavor si acaso es cierto que entiendes lo abstracto, no seas cruel y dime que no es mentira, para buscarte después cuando tus ojos alcansen la unicidad hacia mi ser. 

No hay comentarios:

Nunca más en la vida

Nunca te quedó claro que jamás quería volverte a ver, al menos por mi voluntad propia.  Por tu parte tenías esa idea idiota de que podíamos ...